Curso 2014

Del 30 de junio al 04 de julio

Concejo Intercities: Laredo - Cenon

Mayo 2014

Universidad de Cantabria

Ayuntamiento de Laredo, Medalla de Oro de la Institución

Primer Concejo Intercities

Laredo - Cenon

LAREDO CIUDAD JUSTA

Conoce algunas inciativas

martes, 31 de julio de 2012

¿Y ahora adónde vamos?





Sensibilidad y sencillez para una reflexión sobre el absurdo de la violencia religiosa
Web de la Pelicula 
Tomado de Trazo de tinta

Desde hace bastante tiempo, el mundo del cine está presidido por las superproducciones, los efectos especiales, el 3D y otros muchos subterfugios que enmascaran una alarmante falta de ideas y de capacidad para contar historias. Por eso, cuando uno se encuentra con una película sencilla, rodada con pocos medios, pero que destila sensibilidad por los cuatro costados y que te hace reflexionar, uno olvida decepciones anteriores y se reconcilia con el séptimo arte.


Esto es lo que me ha sucedido hoy en Badajoz en la premiere de "¿Y ahora adónde vamos?", de la libanesa Nadine Labaki, que se estrena comercialmente en España el próximo viernes, día 2 de marzo. La iniciativa ha corrido a cargo del colectivo de profesores La Tribu 2.0., cuyo objetivo es la incorporación de la cultura audiovisual al mundo de la enseñanza.


"¿Y ahora adónde vamos?", se trata de una película sencilla, que discurre íntegramente en una pequeña aldea, en la que conviven en aparente armonía las comunidades cristiana y musulmana. El villorrio es una isla de calma en medio de un mundo convulso y de un país, Líbano, martirizado por décadas de luchas religiosas. Si se mantiene en pie es gracias al empecinamiento, esfuerzo y humanidad de las mujeres, sin distinción de credos ni condiciones sociales. Éstas, con grandes dosis de sentido común, no exento de humor, e ideas que en ocasiones rozan el surrealismo, son capaces de mantener a flote su mundo, pese a la obstinada reacción primaria de los hombres, siempre al borde del baño de sangre.


La directora Nadine Labaki, reconocida internacionalmente por su anterior trabajo "Caramel", consigue transmitir emoción y sensibilidad, sin caer en la sensiblería. Se nota su toque de mujer, ese punto que a los hombres quizás se les escapa, en la plasmación del sentimiento de pérdida por la muerte de un hijo o de un marido. Por eso las mujeres son las protagonistas, representan la fortaleza, el vínculo con la tierra y la sensatez, pero también la creatividad, la imaginación y la capacidad para asumir riesgos en la búsqueda de soluciones para sus problemas.


Por otra parte la película es un canto a la comunidad, a la convivencia entre las personas, por muy diferentes que puedan ser sus creencias, su condición económica, su nivel social, etc. Labaki nos hace reflexionar sobre lo absurdo de morir y matar por diferencias religiosas: es muchísimo más lo que nos une por el simple hecho de ser personas, que lo que nos pueda separar por creer en un dios u otro.


Todo ello aderezado por una magnífica fotografía de los paisajes áridos y semidesérticos que rodean a la aldea, una banda sonora y unas canciones que ayudan a crear el ambiente y el tono necesario en la película y unos actores suficientemente efectivos como para perfilar los rasgos psicológicos de los personajes, en especial de los femeninos.


La verdad es que ha sido una experiencia reconfortante, que recomiendo a todos los que tengan la oportunidad de ver la película.

Galería fotográfica Festival de Interculturalidad y Derechos HUmanos Laredo 2012

Aquí encontrarás algunas fotos de estos días de festival, si tienes fotos de este evento por favor envíalas a interculturalidadyddhh@gmail.com.

lunes, 9 de julio de 2012

¡El Curso ha comenzado!

22 participantes han iniciado hoy la quinta edición del Curso de Interculturalidad y Derechos Humanos. En esta ocasión somos 18 mujeres y 4 hombres con profesiones muy diversas interesados en este tema. Sergio Sanfilippo Azofra, director general de los cursos, y Pilar Santiesteban, directora del curso, nos han dado la bienvenida, luego Pilar ha hecho un interesante ejercicio de creatividad para romper el hielo y conocernos. Jaled Ibarra ha hecho la parte teórica de su taller El poder de La imagen, dejándonos bellísimas fotos y profundas reflexiones acerca del importante poder de la imagen en la actualidad. En el descanso pudimos disfrutar de productos de comercio justo y para terminar la mañana escuchamos a Natalia Massé Minchero responsable de formación e inserción laboral de personas víctimas de explotación sexual - APIP- quien nos guió por una reflexión acerca del papel de la prostitucón a lo largo de la hitoria y de los importantes retos a los que nos enfrenta en la actualidad, aun mas cuando cada vez está mas asociada con el tráfico de personas. A continuacón algunos de los videos compartidos por los ponentes:

¡TODOS PODEMOS SER CREATIVOS!



CAMPAÑA EUROPEA CONTRA LA TRATA DE PERSONAS

 

 
 

 
 

jueves, 5 de julio de 2012

Si la tierra fuese un Banco


Por Florent Marcellesi, activista ecologista, investigador y miembro de Equo
Artículo publicado en Diario Público, el 20 de junio del 2012
Cierren los ojos. Imagínense que el planeta Tierra es un banco. Piensen en el balance de su gestión en los últimos años. ¿Qué ven?
En la pirámide, aparece un consejo de administración, mayoritariamente compuesto por transnacionales y Estados desarrollistas, que ha llevado el negocio con un principio básico de injusticia ambiental: privatización de los bienes comunes y de la vida (agua, atmósfera, semillas, genes, etc.) y socialización de las pérdidas para generaciones presentes y futuras: agotamiento de los recursos naturales y contaminación de nuestro entorno. Tras lucrarse alegremente durante décadas a costa de su juguete, ha dejado un déficit ecológico enorme: el año 1986 fue el último año en que el conjunto del planeta fue capaz de (re)generar y asimilar tantos recursos ecológicos como los que consumió y desechó. Sin embargo, en 1995 tal equilibrio ya no era posible: la biocapacidad generada solo cubrió hasta el 21 de noviembre, y en el 2010 hasta el 21 de agosto.
Como no, este consejo ha maquillado hasta el último momento las cuentas reales de su empresa. Montando cortinas de humo, como el marketing verde o el desarrollo sostenible, ha conseguido hacernos creer que su pésima gestión es el maravilloso objetivo que tendrían que alcanzar las personas más desfavorecidas y los países del Sur. La letra pequeña del contrato indica, no obstante, que vivimos a crédito ya que si continuamos con el business as usual, la humanidad necesitaría 2 planetas en el 2030 y casi 3 en el 2050 para satisfacer sus demandas. Pero sobre todo, indica que no existe ningún seguro, ni cantidad monetaria, que pueda revertir el salto colectivo de una civilización al precipicio.
Al mismo tiempo, se van acumulando las deudas, convirtiendo las deudas privadas (de unos pocos) en públicas (de toda la ciudadanía). Por ejemplo, la deuda de carbono, es decir la deuda adquirida por la contaminación desproporcionada de la atmósfera por parte de los países del Norte, ascendía a nivel mundial en 1990 a 1 millón de millones de euros. Por si fuera poco, el precio de barril de petróleo, verdadera prima de riesgo del sector ecológico y factor clave en las crisis alimentarias y financieras, no deja de batir récords en los mercados, empujada por la especulación, la demanda de los países emergentes y la imposibilidad de producir más oro negro. Resumiendo: antes de la crisis y según los criterios manejados por parte de las agencias de notación, esta gestión habría merecido una triple A. Después de la crisis y según los criterios manejados por los gobernantes, los responsables de tal estafa ecológica se habrían merecido un jugoso premio. En definitiva, si la Tierra hubiese sido un banco, se habría merecido un buen rescate.
Sigan con los ojos cerrados y, ante tantos despropósitos que nos pueden llevar hacia el ecofascismo o el colapso, dejen fluir la indignación dentro de sus venas. Acompañen mentalmente a todos aquellos movimientos y personas que luchan contra los desahucios ecológicos, en España o en Argentina contra el fracking, en Perú o África contra las minas gigantes a cielo abierto, en Brasil y China contra las represas faraónicas. Como el #15MpaRato y como en Islandia, además de resistencia, pidan verdad, justicia y reparación a los responsables de todos estos desastres ambientales. Aunque todavía no exista un Tribunal Internacional de Justicia Climática (¡reivindiquémoslo!), hagamos como en Ecuador donde Chevron-Texaco está condenado a pagar más de 9.000 millones de dólares a comunidades indígenas y colonos mestizos por los daños socioambientales causados durante sus operaciones petroleras en la Amazonia.
No nos conformemos con esto: demos también voz a los sin voz para que la Pacha Mama —sustento esencial de la vida en el planeta— tenga derechos. Pongamos en marcha en el Norte alternativas como las iniciativas en Transición, las monedas locales y bancos de tiempo, los mercados sociales, los huertos urbanos, los grupos de consumo, las cooperativas energéticas o de vivienda, la economía solidaria y del cuidado, etc.. Reforcemos así la autonomía y el empoderamiento personales y colectivos, la soberanía alimentaria y energética, el buen vivir y la autogestión de los bienes comunes, es decir todas aquellas actividades que nos permiten crear sociedades resistentes a los durísimos cambios ecológicos ya presentes y aún por venir. En este otro mundo, la Tierra no sería una entidad financiera vertical y tecnócrata: sería más bien una cooperativa horizontal y del conocimiento libre donde la meta es vivir bien con menos. Sin austeridad impuesta, ni crecimiento ilusorio, desde la conciencia de que si estamos en esta nave Tierra, es para ser felices dentro de los límites ecológicos del Planeta.
Pueden abrir los ojos: este mundo ya está en construcción. Pase lo que pase en Río+20 y demás cumbres internacionales, está aquí, al lado de su casa. Búsquenlo y súmense.